por Dr. Pedro Rovere, Médico Dermatólogo
De manera típica se diferencian tres etapas:
1. Desarrollo del halo acrómico o blanquecino, entre varias semanas y pocos meses.
2. Regresión del nevo o lunar central, en meses o años.
3. Repigmentación del halo, en meses o años, en casi todos los casos.
La explicación de este fenómeno no está clara, aunque en la destrucción de células névicas parecen estar implicados factores inmunológicos.
Estos casos deben consultarse ya que existen lunares displásicos o melanomas que pueden presentar este fenómeno de halo alrededor. Estos otros casos son diferenciables y se pueden diagnosticar en la consulta dermatológica por medio de estudios de dermatoscopía o histología.
Una vez que se determina que se trata de un nevo halo estamos ante una situación de una lesión totalmente benigna. Si bien no hay un tratamiento específico para estos casos, muchas veces se repigmenta con el tiempo. Eso sí, debemos usar protección solar y realizar una consulta de control a los tres y seis meses.